Vamos a recorrer la costa de las islas Greigas en velero. Llegaremos a lugares inaccessibles por tierra, bahías y calas remotas e islas increíbles que nos sorprenderán por su naturaleza y sus paisajes.
Empezamos este viaje en velero por Grecia en la Isla de Naxos. Desde allí pondremos rumbo a Isla de Amorgos. Seguiremos hacia occidente, hacia su isla vecina, la Isla de Ios. Navegaremos hacia la pequeña isla de Sikinos, para después continuar hacia la isla de Folegandros y finalizar el viaje en la Isla de Milos.
Un recorrido por las islas griegas del archipiélago de las Cícladas que mejor han mantenido su autenticidad. Vamos a recorrer sus costas y adentrarnos en su interior para conocerlas en profundidad.
Algunos datos y puntos de interés sobre las islas que vamos a recorrer:
ISLA DE AMORGOS.
Montañosa y escarpada, Amorgos sorprende por sus paisajes e impresionantes acantilados que caen sobre el azul del Mar Egeo. Su punto más alto, el Monte Krikelo, se eleva a 821m de altitud, y destaca en la pequeña superfície de la isla de 126km cuadrados. Su capital se encuentra en el interior, y es conocida con el nombre de Amorgos o Chora. La isla tiene dos puertos principales. Egíali, situado al este de la isla, y Katapola, que se encuentra al oeste.
La isla de Amorgos, mantiene una autenticidad especial, y vale la pena adentrarse en su interior para conocer su vida más traicional y rural. Tiene una extensa red de senderos que recorren magníficos paisajes, encantadores pueblos, y impresionantes acantilados.
A 300 metros sobre el nivel del mar, se alza uno de los Monasterios más impresionantes de Grecia. Se trata de una construcción del 1017, una de las más antiguas de las Islas Cícladas.
ISLA DE IOS.
Ios es una isla paisajes montañosos y escarpados acantilados sobre el mar. Su punto más alto es el Monte Kastro, a 723m de altitud. Al noroeste de la isla está su puerto principal, en la Bahía de Ormos. Desde allí, se puede llegar en un pequeño recorrido a pie hasta su capital, que se alza en lo alto de una colina, mostrando las típicas construcciones de casitas blancas de las Cícladas.
Los principales atractivos turísticos que se pueden visitar son: El yacimiento prehistórico de Skarkos, la tumba de Homero, los restos del Castillo Veneciano de Paleocastro, y sus numerosas iglesias. Se dice que la isla tiene 365 iglesias y capillas.
En Ios podemos encontrar una deliciosa producción local de quesos de cabra, así como recolección de miel, y otras especialidades gastronómicas de la zona, como el Tsimetia, )calabacín, rellenos de arroz), maci (fideos artesanales), mermitzeli (pasta de cebada artesanal), y diferentes dulces y pasteles.
Ios también cuenta con hermosas playas de arena blanca. Algunas de ellas, bastante concurridas en plena temporada turística, pero se puede encontrar opciones de playas más remotas dónde relajarse y disfrutar de la costa de esta isla.
ISLA DE SIKINOS.
Una pequeña isla con encanto. Una de las Cícladas que mantiene su autenticidad. Playas de increíbles aguas azules, costas salpicadas por casitas blancas, un entorno rural característico de las islas Griegas, y tabernas típicas donde degustar una buena gastronomía Griega.
Aloprónia, es el pintoresco puerto de la isla. La capital de la isla, Chora, es una de las más bonitas de las Cícladas. Sus características calles empedradas y laberínticas callejuelas, invitan a perderse y pasear sin rumbo.
Se pueden recorrer los caminos de la isla, y visitar el Monasterio de Zoodochos Pighi, construido al borde de un acantilado. Un lugar perfecto donde contemplar una magnífica puesta de sol.
Entre las especialidades locales encontramos, miel de tomillo, alcaparras, y quesos locales.
ISLA DE FOLEGANDROS.
Una isla auténtica, con sabor local, y de las más bellas y menos conocidas de las Cícladas. Paisajes naturales en una costa escarpada en tan solo 12 km de pura belleza natural donde encontramos numerosas calas remotas, muchas de ellas solo accesibles en barco.
Folegandros, únicamente tiene una carretera asfaltada, que recorre de punta a punta la isla. Su capital, Chora, también merece una visita. Con sus calles empedradas, casitas blancas, animadas plazas y tabernas locales.
ISLA DE MILOS.
Con aguas de un azul intenso y un paisaje casi virgen en una isla volcánica de lugares sorprendentes. Milos es otra de las islas griegas que ha sabido respetar la naturaleza y mantener su autenticidad. Una isla que nos devuelve a los orígenes y que nos hace disfrutar de una vida sencilla junto al mar.
Plaka es la capital de la isla, y en ella se conserva uno de los centros urbanos históricos más impresionantes de todo el archipiélado de las Cícladas.
La isla también es conocida por ser el lugar donde se descubrió la famosa estatua Venus de Milo, encontrada en 1820 por un granjero de la zona.
Otro de sus atractivos es el espectacular paisaje natural de la Playa de Sarakiniko. Un paisaje lunar entre aguas turquesas y rocas de un blanco intenso.
Kleftiko, es una bahía llena de cuevas e impresionantes formaciones rocosas. Vale la pena acercarnos y ver este lugar tan especial.
Recorriendo la costa de Milos en velero, podremos llegar a playas inaccessibles por tierra, con paisajes asombrosos y aguas turquesas y cristalinas.
Pequeños pueblos pesqueros pintorescos, como Klima, con sus coloridas casas y estilo tradicional, o el encantador asentamiento de Pollonia, frente al mar y con varias tabernas donde degustar una buena gastronomía local.
Milos tiene conexiones de Ferrys con Atenas y vuelos que contectan con el aeropuerto internacional.
